LA PROPIEDAD DE LA MATERIA

Instalación: TIERRA Y ORIGEN, Manuel Luna y Virginia Marín, exposición: INTÍNSECOS

Estamos formados por materia, la materia se compone de átomos, y estos están constituidos, según indican los científicos, por protones, neutrones y electrones. Los distintos tipos de elementos químicos, con su número atómico, quedan recogidos en la conocida tabla periódica, tan difícil de memorizar cuando eres estudiante. En general, nuestra composición es de; oxigeno (O), en un 65%, carbono (C) en un 18%, hidrógeno (H) en un 10%, nitrógeno (N) en un 3%, calcio (Ca) en un 1,5%, fosforo (P), además potasio, sodio, azufre, cloro, magnesio y dicen que el hierro suficiente para formar un clavo. Todo ello mezclado según el magistral patrón que marca nuestra genética. ¿Qué es entonces, lo que creemos poseer? ¿Unos materiales básicos en cantidades variables, organizados mediante una pauta que incluye la propia naturaleza humana? Lo que podemos considerar "nuestro" es la patente de la fórmula, que aunque aún no sabemos ejecutarla en un laboratorio, nuestra genética la verifica perfectamente. Genética, que compartimos en porcentajes más o menos elevados con el resto de seres vivos. El concepto dudoso del "yo" se difumina ante este planteamiento; ¿pues qué somos?, el despertar consciente de la materia, que encamina su paso hacia quien sabe qué y hacia quién sabe dónde. Eso sí, podemos al menos intentar definir cómo queremos ir caminando, influir en nuestra trasformación y seguramente en la senda que sigamos, en definitiva, en la talla de nuestra esencia. Ahí, si podemos alzar nuestra voz individual, que no es más que una nota dentro de la gran sinfonía colectiva. Somos un experimento de la naturaleza, que mide la propia capacidad de ser, para transmitirla a generaciones venideras, mediante una ínfima variación en nuestro diseño sobre la pauta heredada. ¿Qué poseemos pues?; solamente la capacidad de ordenar elementos de una manera determinada, que nos ha sido entregada y que nosotras/os podemos y debemos intentar seguir orientando, cada vez de forma más lúcida.

Si ya es dudosa la propiedad de la materia que nos compone, y este concepto señala directamente al egoísmo, la situación se acentúa en extremo cuando tratamos de establecer algún tipo de dominio sobre otras/os, sea del tipo que sea. 

- El nitrógeno de nuestro ADN, el calcio de nuestros dientes, el hierro de nuestra sangre, el carbono de nuestras tartas de manzana se hicieron en los interiores de estrellas en proceso de colapso. ¡Estamos hechos, pues, de sustancia estelar!. El origen y la evolución de la vida están relacionados del modo más íntimo con el origen y evolución de las estrellas. -  Carl Sagan.