SI ALGUNA VEZ ME VEN PERDIDO RECUERDENME QUIEN SOY

Si alguna vez me ven perdido, ofrézcanme pasear por la orilla de la playa y recuérdenme quien era cuando niño; ese niño que aún reflejan mis actos y marca mi madurez. Nombren quien es mi familia, y quienes aquellas personas que me quieren. Cuéntenme las historias que mi abuelo relataba, que habitan mi fantasía habiendo sido reales. Recítenme cuáles eran mis juegos , los que hoy se funden con el ensueño. Recuérdenme cuando tuve miedo durante la infancia y también cuando crecí, señálenme su origen. Hablen sobre mis lágrimas, mis gritos y sobre mis risas, de las veces que estuve hundido y como volví a respirar. Díganme que pasaba noches enteras haciendo arte, acompañado solo con música y una botella de vino. Repítanme lo que no fui capaz de hacer, aunque lo deseaba con el alma. Háblenme de quien me enamoré, por quien lloré, por quien soñé, por quien fui feliz. Describan donde habitan mis sueños, el lugar donde más felicidad hayo . Declaren que no busqué otra cosa que ser yo mismo, manuel luna , digan mi nombre. Explíquenme que mi intención fue evolucionar a mejor y mejorar mi entorno, que he hecho para ello mucho menos de lo que me habría gustado y que en ocasiones me movió el egoísmo. Que perseguí la utopía, que pretendí habitarla y quizás solo me sirvió para adormecer la realidad. Que quise alcanzar un estado de enamoramiento perpetuo, y tal vez amé al amor y a la pasión más que a las personas. Sacúdanme si hace falta y recuérdenme que me enseñaron a buscar una estabilidad económica para mi familia y para mi, que no cuadraba con mis deseos... y yo no fallé, pero falseé mi vida. Señalen que creo en esa buena estrella que guía mis pasos y me protege, pues mis imprudencias cuestionan habitualmente el por qué sigo vivo. Mencionen que mi corazón habita en el mar y en sus profundidades. Que el daño a otras personas me duele, el daño a la vida me duele. Que me gustaba la lluvia, el verde que tenía el campo habitado y el tamaño del mundo durante mi infancia. Que soy capaz de sobrevivir económicamente con mucho menos de lo que poseo, que el resto no me hace más feliz. Háblenme que adopté mucha norma impuesta sin quererlo, pero también me enfrenté a otras, y que al menos siempre fui crítico con ellas, pues abracé una cierta anarquía, franca y conciliadora. Expónganme que no necesitan recordarme que tengo una hija maravillosa, que me ha tendido su mano, que alumbró mi existencia, y a la que nunca jamás podré olvidar.

manuel luna
Oleo sobre tabla 2005

Comentarios

Entradas populares de este blog